Mundo Salud

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miércoles, mayo 30, 2007

Tomate y brócoli contra el cáncer de próstata

El consumo de tomate y brócoli, ricos en licopeno, ayuda a retrasar el crecimiento del cáncer de próstata.

Ensayos en ratas demuestran que comer tomate y brócoli es mejor que comer sólo un tipo de hortaliza o suplementos de licopeno para retrasar el crecimiento de tumores de próstata, comunica un equipo de investigadores en “Cancer Research”.

Los resultados muestran que los varones que quieren superar o prevenir el cáncer de próstata deberían optar por consumir alimentos naturales en lugar de suplementos dietarios, explica la Dra. Kirstie Canene-Adams, de la University of Illinois y autora principal del estudio. Esto respalda las guías de salud pública que recomiendan el consumo variado de frutas y verduras para reducir el riesgo de cáncer, añade la citada investigadora.

El equivalente humano de la dieta que recibieron las ratas durante el estudio serían 2,5 tazas de tomates cherry, dos tomates de 7,6 centímetros de diámetro o una taza de salsa de tomate diaria más 1,5 tazas de brócoli diarios, indicó Canene-Adams. Asimismo, el equipo destacó que estudios epidemiológicos demostraron que los hombres que consumen esa cantidad de brócoli y tomate 3 a 5 veces por semana reducen un 30% el riesgo de cáncer de próstata.

En el estudio, los investigadores alimentaron ratas con distintas dietas: alimentos suplementados con distintas concentraciones de licopeno; polvo de tomate; polvo de brócoli; un 5% de polvo de brócoli más un 5% de polvo de tomate, o un 10% de brócoli más un 10% de tomate. Los animales recibieron la dieta asignada durante un mes antes de que los investigadores les implantaran tejido de tumor prostático. Otro grupo de roedores fue castrado.

El crecimiento tumoral fue más lento en los animales castrados, seguidos de los que recibieron una dieta con un 10% de tomate y un 10% de brócoli.

Estudios microscópicos demostraron que la combinación vegetal más concentrada mejoró el mecanismo de destrucción de las células tumorales y retrasó su crecimiento. No obstante, los animales que sólo recibieron licopeno no mostraron una reducción significativa del crecimiento del tumor.

"El licopeno solo tendría alguna capacidad contra la actividad del cáncer de próstata, pero el tomate entero y su variedad de sustancias fitoquímicas demuestran claramente un potencial anticancerígeno que supera al carotenoide puro", concluye el equipo.

Fuente: Cancer Research 2007.