Los varones controlan el hambre mejor que las mujeres

Las mayores tasas de obesidad en las mujeres podrían explicarse por una mayor capacidad de los varones para inhibir la activación cerebral por la comida.

Según sugiere un estudio del Laboratorio Nacional de Brookhaven en Upton, EE.UU, que se publica esta semana en la edición digital de la revista "Proceedings of the National Academy of Sciences", los hombres controlan el hambre mejor que las mujeres.

Más concretamente, los resultados muestran que los hombres tienen una mayor capacidad para controlar el hambre cuando se les obsequia comida, lo que podría ayudar a explicar algunas de las diferencias de género en las tasas de obesidad.

Los investigadores, dirigidos por el Dr. Gene-Jack Wang, realizaron dos experimentos en los que 23 personas no obesos y con buen estado de salud ayunaban durante 17 horas, período tras el cual se centraban en su comida favorita o utilizaban una técnica llamada "inhibición cognitiva" para suprimir los pensamientos sobre el hambre y el comer.

Cuando se centraban en su alimento preferido, el hambre y el deseo por la comida crecían a una tasa similar en ambos sexos, según mostraban el escaneado cerebral con tomografía con emisión de positrones(PET).

Aunque la inhibición cognitiva disminuía el hambre en ambos sexos, la técnica reducía de forma significativa el deseo por la comida únicamente en los varones. Así, la PET cerebral mostró que aquellos hombres que utilizaban las técnicas de inhibición cognitiva presentaban una menor activación cerebral en las regiones que participan en la regulación emocional, el condicionamiento, y la motivación.

De acuerdo con los investigadores, “estas regiones intervienen en el procesamiento de la conciencia de la intención de comer”, sugiriendo en consecuencia que las mayores tasas de obesidad en las mujeres podrían provenir de la mayor capacidad para inhibir la activación cerebral hacia la comida por parte de los hombres.

Las mujeres son físicamente menos activas que los varones

La diferencia prácticamente se equilibra en la senectud, época en la que la actividad física resulta nimia con independencia del género.

De acuerdo con los resultados de dos estudios presentados en la Reunión Anual de la Sociedad Británica de Medicina del Comportamiento, celebrada en la Universidad de Exeter, Reino Unido, las mujeres son físicamente menos activas que los varones a cualquier edad.

El primero de los trabajos, diseñado para evaluar el nivel de actividad física y su relación con el comportamiento, fue llevado a cabo con 52 niños y 82 niñas con edades comprendidas entre los 10 y los 11 años de ocho escuelas elementales británicas. Los investigadores, dirigidos por la Dra. Nicola Ridgers, de la John Moores University de Liverpool, Reino Unido, hallaron que las actividades físicas emprendidas por los niños durante el juego eran un 6% más vigorosas –así como un 8.7%entre moderadas y vigorosas– que las de sus compañeras.

La razón por la que se explica esta diferencia se encuentra en “el tipo de grupos que establecen tanto las niñas como los niños para sus juegos. Así, las niñas suelen congregarse en grupos más pequeños –de 2 a 4 – y la mayoría de los juegos son verbales, básicamente conversación y socialización, lo que posiblemente serviría para entender porqué son menos activas”.

Por el contrario, los niños suelen congregarse en grupos más grandes –de 10 o más integrantes–, lo que conlleva a la realización de juegos de mayor actividad física, como el fútbol.

En este contexto“las escuelas deberían estar al corriente de las diferencias en el comportamiento de las niñas y los niños en su tiempo de juego, para así asegurar la provisión de equipamiento y actividades suficientes para animar a aquellos/as que juegan en grupos más pequeños a ser más activos físicamente”.

Población anciana

Por su parte, según los resultados del Proyecto Población Anciana y Vida Activa, los varones también suelen ser más activos físicamente en las edades avanzadas de su vida.

En palabras del Dr. Ken Fox, de la Universidad de Bristol y director del Proyecto, “es cierto que los niveles de actividad física de la población mayor de 70 años son muy bajos. De hecho, más del 70% de los participantes de nuestra investigación acometía menos de 5.000 pasos diarios. Sea como fuere, las mujeres fueron de nuevo menos activas que los varones”.

Como explicó el Dr. Adrian Taylor, de la Facultad de Deportes y Ciencias de la Salud de la Universidad de Exeter, “la sociedad y el ambiente nos dirigen a una menor práctica de actividades físicas, lo que conlleva consecuencias negativas para nuestra salud, caso de las cardiopatías, la diabetes o los problemas de salud mental que presenta la población a todas las edades”.

Por ello, concluyó el Dr. Taylor, “estos estudios son importantes, pues nos ayudan a comprender cuán físicamente activa es nuestra población, una información que puede ser utilizada para promocionar de la mejor manera posible la actividad física en todos los grupos de edad”.

Fuente: Jano.es.